Este mes de Septiembre quería salir a escalar por la península donde hay muchas escuelas de calidad donde elegir, por lo que aquí estoy. La idea fue subir con la furgoneta y así vivir lo más a pie de vía posible. Salí del puerto de Portimao, en Portugal, donde nos dejó el barco, al gringo y a mi, y subimos hasta Madrid, donde nos esperaba un amigo para ir unos días a escalar a Cuenca.
El tiempo nos daba una tregua y nos dejaba unos días buena temperatura, necesaria para escalar bien en esta escuela donde además de agujeros hay regletas muy pequeñas. Aún así, aprovechamos para escalar en los sectores más frescos como Valdecabras o los Merenderos,donde queríamos sobre todo, escalar a vista, que es lo más que nos falta en nuestra isla, aunque al final también probamos algún proyectito.
Este es el lugar donde dormíamos todas las noches.
Este soy yo probando una vía en cuenca dondelos sectores son de mucha calidad y tienes algunas líneas de más de 30 metros.
Los últimos días de la semana, se metió de nuevo el calor y las sensaciones no eran las mismas. La temperatura es un factor importante para escalar, y si hace calor es mucho más dificil encadenar vías de tu máximo nivel. Pero cuando uno está fuera de casa, quiere aprovechar al máximo el tiempo y las vías.
¡ Hasta pronto!
